Triunfo con sabor amargo
El tercer venezolano en el negocio de las carreras con
oportunidad para competir en la máxima categoría proeza similar, cuando en sus
tiempos lo hicieron el originario de Italia Ettore Chimere y Jhonny Cecotto, el
piloto venezolano Pastor Maldonado de la escudería Williams, se alzaría en lo
más alto del podium con su primera victoria en la F1 en el gran premio de
España 2012, llegando a convertirse en el primer venezolano en lograr esta
hazaña.
Luego de dos temporadas de bajos rendimientos y muchos
contratiempos el piloto logró situarse en un puesto representativo para el
país, dejando ver en claro que esta luchando fuerte por mejorar y llegar al
nivel de sus rivales, de esto modo y gracias a la “pole position” que obtendría
en las pruebas de clasificación conseguiría su gran triunfo.
Hoy con sus 27 años de edad llega a escribir su nombre en
los libros históricos de Venezuela, destacándose en la lucha por la punta de la
carrera con el piloto español Fernando Alonzo quien ha sido dos veces campeón
mundial de la Formula 1.
A pesar de la victoria del piloto maracayero y de los
halagos por parte de representantes del
Gobierno y los venezolanos en general, este triunfo tiene sabor amargo, por la
gran cantidad de dinero abonado al patrocinio por parte de la petrolera
venezolana PDVSA, cabe destacar que en el país no se vive uno de sus mejores
momentos, los habitantes están consumidos en la violencia que cada día genera
más muertes, los damnificados hacinados en refugios, y la cantidad de denuncias
de corrupción a personal relacionado con grandes cargos en el gobierno empañan
la alegría que caracterizan estas noticias, donde venezolanos en el exterior
colocan en alto el nombre de su país.
Solo queda esperar que algún día, estas noticias sean
sinónimos de esperanzas y sueños reales,
donde Venezuela sea vista con ojos de prosperidad, que su gente no sienta que
el dinero de una de las compañías insignias del país esta siendo malgastado
sino utilizado para la construcción y crecimiento de la nación.
Florangela Rodríguez
No hay comentarios:
Publicar un comentario