lunes, 29 de noviembre de 2010


Aún hay tiempo para salvar nuestro planeta

El último informe de los expertos de la ONU sobre cambio climático certifican que las emisiones de gases de efecto invernadero provocan lluvias torrenciales, inundaciones y sequías. Hasta ahora, diversos trabajos científicos, incluso un informe de la Organización Meteorológica Mundial, han llamado la atención sobre el origen antropogénico de los fenómenos extremos del clima. Pero  el más reciente informe de los 192 países representados en el Panel Intergubernamental para el Cambio Climático (IPCC) de Naciones Unidas asegura que el hombre es, en gran parte, responsable del cambio climático y que de seguir este calentamiento al paso que va, a futuro próximo pasará a ser una amenaza para la supervivencia humana.
Esta es una situación lamentable y alarmante. Si contaminamos el planeta se revierte en perjuicio de nuestra salud y todo lo que se haya ganado no podrá curar el daño hecho a nosotros mismos. Los desastres demuestran que a pesar de que se haya avanzado y evolucionado,  la naturaleza reacciona ante el crecimiento indiscriminado de la humanidad y el daño al planeta, generando fenómenos naturales donde en la mayoría de los casos arrebata preciadas vidas humanas.
El cambio climático es una realidad científicamente demostrada. Sus efectos se viven, en mayor grado, en las zonas más pobres de nuestro mundo. Por tanto, es necesario que ese conocimiento científico que se está adquiriendo del estudio del fenómeno llegue de la mejor manera a toda la humanidad, para que se tome conciencia de este problema que nos afecta a todos por igual. La tierra simplemente nos está  diciendo que algo no funciona adecuadamente. Ese algo, es cómo las sociedades se relacionan con el medio ambiente, ya que la sobreexplotación de los recursos naturales y la industrialización están alterando el sistema climático.
Existen organismos internacionales como la Organización de Naciones Unidas (ONU) que pudiera asumir una posición que genere acciones efectivas para tratar de controlar la  contaminación atmosférica, como por ejemplo haciendo que los países altamente industrializados como EE.UU y China asuman el compromiso de bajar sus altos niveles de contaminación y la emisión de gases con efecto invernadero, no la han disminuido. También se debería hacer más campañas educativas  que ayuden a aumentar la conciencia pública sobre este tema.
Aunque no  podemos detenerlo porque ya está ocurriendo y seguirá en el futuro, son muchas las cosas que podemos hacer por disminuir sus impactos, especialmente reduciendo la emisión de gases de efecto invernadero en especial el dióxido de carbono
Este calentamiento seguirá si no hacemos algo, es importante reflexionar en nuestros hábitos de consumo y actitudes hacia el cuidado y protección del ambiente, podemos ayudar a partir de actividades cotidianas como: ducharse con agua fría o tibia ya que esto evita que mucho vapor de agua se difunda hacia la atmósfera, plantando más árboles ya que estos absorben las grandes cantidades de dióxido de carbono y liberan oxigeno, intentando acercarse al equilibrio al reducir la cantidad de CO2 en exceso que se encuentra en el planeta. Caminar, usar bicicleta o transporte público masivo ayudará a reducir  el monóxido de carbono emitido por el parque automotor.
Con estos cambios de comportamiento podemos salvar a nuestro maravilloso mundo que tanto nos ha dado.

¡Hagamos de nuestro mundo un mejor lugar, 
aún estamos a tiempo!

 

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