Obras con sentido social
El teatro es una vía capaz de generar conciencia
El alcohol puede convertirse en una pesadilla.
El alcoholismo enfermedad que padecen las personas que no tienen el control sobre el uso del alcohol que es una droga socialmente aceptada. Esta genera un drama en el que participan varios personajes, el bebedor, su familia, amigos y hasta los compañeros de trabajo.
¿Quién no se ha emborrachado? Hay miles de historias donde un borracho pone la cómica pero ¿Sabes en qué momento dejas de ser alguien divertido y te conviertes en un problema?
Para comprender este mal, debemos contemplar la situación como una obra de teatro y observar las actuaciones detalladamente. El protagonista de la historia ve en el alcohol un remedio que durante un tiempo lo aleja de sus tormentos, disminuye sus temores, esto es lo que conforma el inicio de la obra.
Este primer acto está lleno de características importantes, el protagonista en su interior pasa por una serie de contradicciones acerca del amor, sexo y el despecho y se refugia en la bebida.
En el segundo acto los problemas son resueltos por las personas que conviven con él o ella. En el tercero el intérprete del personaje principal muestra un patrón, se muestra como un ser independiente, cuando en realidad es dependiente. Empieza el proceso de negación donde “El problema con la bebida no existe”.
En Venezuela existe una obra de teatro llamada “Relatos Borrachos”, dirigida por la actriz Elba Escobar, quien cuenta con un reparto de actores de la talla de Daniela Alvarado, Nacho Huett, Eduardo Orozco y Caridad Canelón. La temática es el alcohol y sus consecuencias.
Las características propias de una persona dependiente de esta sustancia liquida, son la incomprensión y el descontrol, estos son algunos de los síntomas que reflejan los actores de la pieza teatral “Relatos Borrachos”.
Las consecuencias que trae consigo la ingesta de licor, son las diferentes enfermedades como el cáncer, la gastritis, la cirrosis hepática.
Los licores con grados de alcohol han estado presentes en las civilizaciones chinas, egipcias y la cultura mesopotámica, estos usaban el vino con carácter ritual. El sueco Magnus Huss en el año 1849, le colocó el término de alcoholismo a esta toxicomanía.
Muchas personas tienen la creencia que ingerir alcohol con moderación puede ayudar a algunos a no ser dependientes esto no funciona con todo el mundo. Para algunos la “Moderación” termina siendo una trampa.
¿La dipsomanía puede ser curada?
Es un vicio tratable, es posible sostener la abstinencia por un largo periodo, gracias a esto la salud mejora, sin embargo la recaída es un riesgo permanente. Como problema médico, necesita que se traten los aspectos psicológicos y se requiere de apoyo de trabajadores sociales.
El drama del alcoholismo en adolescentes
Cada vez son más los jóvenes que consumen alcohol en abundancia, generalmente en reuniones o en algún tipo de convivencia social. Lo importante es lograr detener el problema a tiempo en un buen centro de tratamiento de alcoholismo.
Muchos individuos con problemas de alcoholismo han dejado sus estudios, en el colegio o la universidad por ir a tomar con los amigos. Sin saber el error que están cometiendo.
El mensaje final de “Relatos Borrachos”, es que el dipsómano necesita fuerza de voluntad y apoyo familiar para superar este problema. La ayuda principal es emotiva para evitar un final trágico en la obra de teatro que representa cada una de las vidas de los individuos con este padecimiento, es necesario que la familia tome conciencia y no actué como un espectador que solo espera disfrutar del show, que sea capaz de tomar la dirección de la obra y cambiar el guión, para así mejorar la calidad de vida de esos enfermos.
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