Capriles promete recuperar la economía venezolana con un
plan de empleo.
Plan de empleo y seguridad promete candidato presidencial
opositor
El candidato opositor a la Presidencia de
Venezuela, Henrique Capriles, anunció este domingo que, de ganar las elecciones
del próximo 7 de octubre, su Gobierno creará un millón de empleos para jóvenes
de entre 15 y 30 años.
“Nosotros representamos el futuro y tenemos prohibido fallarle a
Venezuela, aquí hay una generación comprometida para que nuestro país eche
pa’ lante y pa’ lante vamos todos” así lo aseguró el candidato
presidencial, Henrique Capriles Radonski, quien acompañado de
cientos de jóvenes, este domingo presentó el Plan Primer Empleo y prometió que creará un millón
de empleos para los jóvenes.
Henrique Capriles se ratifico este domingo 10 de
junio como el candidato opositor para las elecciones presidenciales del 7 de
octubre 2012. Además, el también ex mandatario mirandino subrayó que emprenderá los
máximos esfuerzos por controlar la inflación y eliminar la política de
expropiaciones. Por otra parte, hizo mención a la ola delictiva que mantiene en
zozobra a la ciudadanía, sin que el sector que ostenta el poder haya podido
frenar tal auge. Capriles
Radonski invitó a los votantes a abordar el “Autobús del Progreso”, ratificando
su compromiso con el desarrollo de la nación y el bienestar de sus habitantes.
En vista de la importancia del empleo
para el progreso personal y del país, resulta notorio cómo el tema ha sido
tratado por el candidato de oposición Henrique Capriles Radonski (HCR) con su
Plan de Empleo Para Todos y el Plan del Primer Empleo, presentados en las
últimas semanas.
La propuesta opositora se puede
resumir en tres componentes: (I) promover un plan de inversiones que genere
empleos en el sector público y privado, con proyectos de desarrollo e inversión
regionales específicos; (II) facilitar el acceso al mercado de trabajo de
grupos en desventaja (jóvenes y personas mayores de 60 años) a través del
entrenamiento e incentivos a las empresas; y (III) ofrecer un marco
macroeconómico y social estable que evite la erosión del salario por la
inflación y genere confianza en los inversionistas.
El plan identifica con éxito algunos
de los puntos clave para llevar a cabo una política de empleo exitosa. Sin
embargo, hay al menos tres críticas iniciales: la primera y fundamental es la
falta de detalles. Si bien no todos los votantes van a estar interesados en
revisarlos, al candidato y su comando les conviene ofrecerlos. HCR debe
convencer al país de que su visión y propuestas no son sólo pertinentes sino
posibles. Y es allí donde la claridad será un gran aliado.
La segunda crítica es la falta de
integración del plan con una política para el desarrollo y fortalecimiento del
sector privado. Es probable que más adelante se presente un proyecto definido
para este sector, pero se pierde ahora una oportunidad de comunicar que el
camino hacia progreso nacional pasa por mejorar todos los sectores del país.
Tras una década del discurso chavista que confronta el beneficio de un grupo a
costa de otros, convencer a los venezolanos de lo contrario será sin dudas una
tarea difícil. A pesar de esto, lo correcto es decir a la gente que todos somos
necesarios para avanzar y construir un mejor país. Para tener más empleos
necesitamos más empresas. Finalmente, no basta con que el candidato presente su
plan y se refiera a él en su campaña; éste debe servir para comenzar el diálogo
entre los venezolanos y el candidato. Las universidades son quizás los lugares
ideales para comenzar esta discusión que debe ampliarse luego a todo el país.
Las organizaciones políticas que apoyan a HCR deben llevar el debate a las
comunidades para que todos le demos forma al futuro que queremos en los próximos
6 años. Es el momento de trabajar.
Sarai
Días
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